miércoles, 7 de julio de 2021

El cuento del tiempo

 


!Hola lectores¡ justo el otro dia recordé un viejo cuento (aunque no a quien me lo conto) y justo quería compartirlo con vosotros. 

todo comienza como siempre me gusta decir, hace mucho tiempo, como en todas las buenas historias...

En un reino lejano vivía un hombre  que si bien no era rico, ganaba lo suficiente para vivir, tenia una salud estable, una bonita casa, amigos y una pareja estable, sin embargo llego un momento en el que esto dejo de satisfacerle, no solo quería ser feliz, tambien quería ser rico, famoso y poderoso, un dia paseando por la ciudad escucho hablar de un hechicero que podía conceder cualquier deseo y que residía en un bosque cercano, emocionado, no tardo en ir a buscarlo, al llegar a casa de este quedo deslumbrado ante el lujo y la suntuosidad en la que vivía.

- Hola buen hombre a que viene? le dijo el anciano hechicero.

- Bueno señor, escuche que usted podía concederme mi deseo, ¿es eso cierto? le contesto el hombre

- Si, asi es a veces tardo mas y a veces menos, dime que necesitas y si puedo hacerlo y tu me haces otro favor lo tendrás.    

- Pues vera señor hechicero, si bien no me falta de nada, ansió fama y fortuna, cosa que en mi casa jamás tendré, si bien nada mas me falta. 

Tras pensárselo un poco, el señor le respondió.

Bueno yo tengo fama, fortuna y poder, mas nadie en quien pueda confiar, hagamos un trato, te doy todo lo que poseo a cambio de lo que tienes tu. 

El hombre se lo pensó, hasta que llego a la conclusión de que su casa era demasiado pequeña, su pareja era una carga que le quitaba tiempo y sus amigos solo lo buscaban por su conveniencia, realmente no perdía tanto, de modo que acepto. ¿seguro? le pregunto el hechicero 2 veces mas antes de decirle.

- Muy bien. Dijo mientras se levantaba, voy a darte dos sacos, uno te dará dinero infinito y el otro esta lleno de mi poder e influencias ¡que lo disfrutes! dijo antes de desaparecer por la puerta a disfrutar de su nueva vida. 

El tiempo paso y la gente olvido al hechicero, mientras el hombre era invitado a todas las fiestas, su felicidad ya no tenia limites, sin embargo cuando unas fiebres llegaron a aquel reino el enfermo. quedándose totalmente solo en aquel palacio, ninguno de sus nuevos amigos fue a darle consuelo o compañia, al principio lo llevo bien, pero le acabo agriando, cuando ya no pudo mas fue en busca del anciano.

En su antigua casa veía salir el humo de la chimenea mientras voces familiares de antiguos seres queridos cantaban en el interior, cuando llego a la puerta empezó a llamar a voces al anciano hasta que este salió.

- Hola señor, ¿ por que grita? A lo que el hombre respondió. 

¡ Ladron mentiroso! 

El anciano confundido le dijo, ¿ Por que me tratáis asi, acaso no os di todo lo que me pedisteis? pregunto. 

¡ Tomad vuestra hechiceria y devolvedme mi vida! dijo mientras le arrojaba ambos sacos mágicos, y decidme quien sois ya que me habéis quitado todo.  

En ese momento el anciano rejuveneció pasando a tener la apariencia de un dios tan bello como terrible.

-Soy el tiempo y no creas que te engañe, yo solo te di lo que querías a cambio de lo que ya no valorabas, ahora desaparece de mi vista pues ya incluso a mi me has perdido, tras lo que le cerro la puerta en las narices, mientras el se convirtió en polvo que arrastro el viento sin que quedara algún rastro de el...

Aqui acaba esta historia cuya moraleja es, valora lo que tienes o el tiempo se lo llevara.

ahora este cuentacuentos se despide, y espero que vuelvas de nuevo pues aun me quedan muchas historias que contar. 

jueves, 7 de enero de 2021

Adios 3892 de M.T. Hola 3893 de M.T. un año de tomar decisiones

 


Adiós 3892/2020... Por fin. 
Vaya si nos ha dado guerra este año, entre los terremotos, el coronavirus y sus dos oleadas, la muñeca encantada que se escapa del Museo de los Warren y luego resulta que no, una mudanza internacional... Cuando saqué la carta del Ángel de la Alquimia de la baraja en la que suelo mirar los augurios del año siguiente, pensé que este sería un año de triunfo en el que nada saldría mal... Inocente, lo que ha sido un milagro ha sido llegar al final, pero bueno, supongo que también ha tenido cosas buenas y ventajas, a los que hemos llegado al final del loco jumanji que ha sido este año nos ha hecho más fuertes y más sabios, a algunos con más dolor y a otros con menos.  Quisiera, como cada año, dar gracias a todos y todas las personas que, independientemente de sus circunstancias, no me han dejado sentirme solo en ningún momento, incluso sin importar si hablábamos el mismo idioma, gracias a mis amigas y amigos de Grecia por soportarme, especialmente durante el confinamiento, por que soy a veces demasiado borde en todos los idiomas y ahora que han tenido que aguantarme, con más motivo, gracias a mi familia cibernética tanto a los de Familia Pagana como a mis queridos Tabernarios sin los cuales este hubiera sido muy aburrido, (especialmente a estos segundos capaces de mantenerme hasta altas horas de la noche) este año he echado de menos a mis queridos amigos del "pollo flamígero" ya que no pude bajar a lágrimas y luego debido al coronavirus se canceló la Feria del Dragón, todo ese aislamiento me enseñó cuán valiosa era la gente que formaba parte de mi vida, incluso en el caso de aquellos con quienes tenía peor relación, me di cuenta de que yo tampoco había sido fácil de soportar para ellos.

Mención especial para mi hermana Lucy y mi amigo Fernando, sin dejarme atrás a Diego y Cris que con tanto cariño y confianza me han acogido en su guardia cimmeria, a mi amiga Xantra porque sin sus enseñanzas no sería ni la mitad de buen cuentacuentos de lo que soy, a Meryt e Iromi mis fieles correctoras, a mis amigos de la Frion (especialmente a Emerson) y a mi amigo Fernando por soportarme cada día. 

Sin embargo también me gustaría pedir disculpas (que no perdón) a todas las personas con las que he sido borde o seco sin merecerlo y de las que me he alejado este año, quizás no ha sido lo más correcto, pero sin duda sí lo que necesitaba. 

La gran lección de este año ha sido descubrir mi propio valor como persona. A lo largo de todos estos años he ayudado a mucha gente porque me sentía moralmente obligado a hacerlo, pero sin darle valor a lo que hacía, cuando dos veces la persona a la que le había dado mi corazón lo tiró en la basura decidí que no mendigaría nunca más el cariño ni el amor de nadie, así que bueno, si esta persona lee este artículo... gracias, lección aprendida, sin rencores diría que ojalá la hubiera aprendido antes, pero el aprendizaje siempre llega cuando debe llegar ni antes ni después.

Esto me recordó una frase que el personaje de Albus Dumbledore dice al final de la historia, cuando Harry se lo encuentra en la frontera del más allá  que viene a significar que la ayuda no solo hay que necesitarla sino que hay que merecerla. Este pensamiento me hubiera hecho sentir horriblemente egoísta en su momento pero finalmente he aprendido que no es cuestión de egoísmo sino de amor propio.

Gracias 3893/2020 Adiós, gracias y no hace falta que vuelvas, escribe si acaso... Pero no vuelvas

......................................

Hola 3894/2021 Por ahora te recibo con los brazos abiertos, espero que no seas ni de lejos como tu predecesor y la energía de este eclipse que te anuncia sirva para dejar atrás en las brumas de la memoria un año tan aciago.

Al igual que en todo eclipse "de la oscuridad a la luz", ojalá este año nos devuelva un poco de la cordura perdida y despertar de esta pesadilla, ojalá podamos al menos recuperar parte de lo perdido, pero para ello habrá que tomar algunas decisiones que han esperado demasiado para tomarse, sea lo que sea, cada año es en sí la posibilidad de un mundo nuevo, al final la decisión está en nosotros ¿qué mundo queremos cuando acabe el eclipse? El mundo que el sol ilumine será el que nosotros hayamos escogido.

Para cuando despida el año de nuevo espero haber, como mínimo, aprobado el examen de acceso a la UNED y ser ya universitario, con lo que sea, el futuro está lleno de posibilidades.

Por ahora yo me despido hasta la próxima entrada.  Como siempre  Ambulare, Réspice, Memento y que los caminos os sean propicios.